lunes, 29 de septiembre de 2014

Nostalgia de Ragnarok Online


Entras, eliges servidor, te registras, y entras. Fácil y sencillo.
Vale, empieza lo complicado. Te saltas el tutorial, empiezas en una ciudad que no sabes muy bien dónde se encuentra y tienes que decidir una clase. Juegas con tu hermano, así que un acolyte siempre viene bien para jugar en equipo y poder curar a tus compañeros. Y ahora, ¿qué le subes?

Las estadísticas están ahí, pero no sabes bien que es lo que necesitas subir para tu personaje. ¿Inteligencia y destreza? Matas porings, intentas matar una crisálida que se convierte de repente en una mariposa y te mata. Vuelta a comenzar. Te sientas en Prontera, la ciudad dónde se encuentran la mayor parte de los jugadores. Preguntas una duda, pero no parecen tener interés en responder. Sin embargo, alguien se para y resuelve tus problemas. Ahora empiezas a subirte habilidades prestando atención a sus descripciones. ¿Cuál servirá y cuál no? ¿Mace Mastery? No tiene pinta. Sigues matando porings, ahora de otro color. Vas a unas alcantarillas, a un nido de hormigas y a una mina abandonada. Te mata un bicho que corre mucho y que no sabes lo que es. Vuelves, un tipo con pintas de tener bastante nivel te pregunta si lo has visto, le dices que sí y al rato observas como sale un letrero de MVP encima del vencedor.

Ya tienes nivel 50 de job. Toca elegir. ¿Monk o priest? Te conviertes en un sacerdote. Buscas otros jugadores para seguir explorando zonas. Se enganchan también algunos amigos al juego. Descubres nuevas zonas y ciudades, y la música y las misiones te sumergen en Rune-Midgard. Pasas por una fábrica de juguetes y por mesetas inundadas de flores que te atacan cuando te acercas. Las palabras que más escuchas son “resu please”, “dopas/buffs por favor” y de vez en cuando un “gracias”. Te invitan a una guild, donde está jugando tu hermano y te llevas también a tus amigos.


Y ahí empieza realmente tu aventura. Te lo tomas más en serio, conoces gente de países diferentes y os ayudáis entre todos. Ya no hace falta buscar gente para subir de nivel pasando tiempo con un chat abierto en una ciudad. Te registras en el foro de la guild y escribes en él. Sigues entrenando a la vez que te conectas simplemente para estar sentado en un rincón de Prontera a hablar con el resto del equipo. Ya no avanzas individualmente, la guild también te preocupa y progresa con la ayuda de todos.

Sigues avanzando. Pasas por pirámides, pasadizos subterráneos y por una cueva helada. Preguntas si hay alguien disponible para matar majourus –majos para los amigos-. Y así sigues subiendo de nivel, conociendo más gente e intentando comprender la famosa War of Emperium. Vale, hay 5 castillos en un mapa y hay que romper el Emperium situado en lo más profundo de la fortaleza, consiguiendo echar a todo el mundo para quedártelo tú a defenderlo. Formas alianzas, forjas pactos con otros enemigos e intentas conquistar el castillo. Se decide ir y probar suerte, pero te matan de un golpe. Vuelves a entrar, y sin darte cuenta te encuentras congelado sin poder hacer nada. Descubres que no todo en el juego es matar bichos y subir de nivel.

Te preparas un equipamiento diferente para esas ocasiones. Por lo que cuentan hay que conseguir cartas específicas para el equipamiento de las WoEs. Empiezas a alternar subir nivel con conseguir armaduras y objetos decentes para aguantar un golpe medio potente de un enemigo cualquiera. 0.09% no es un porcentaje tan bajo como para desesperarse, y más si hay ranas y caballitos de mar suficientes para no tardar siglos en conseguir sus preciadas cartas que te ayudarán a resistir a otros enemigos humanos y a evitar congelarte. Obtienes esas cartas y más, sigues subiendo de nivel, conociendo mejor a la gente tanto de tu guild como del servidor y echas un vistazo también al foro del servidor para enterarte de las noticias, los piques entre las alianzas o simplemente leer el off topic.


Casi sin darte cuenta te has plantado en el nivel máximo, pero ahí no se acaba la aventura. Ahora toca renacer, volver a ser nivel 1 y convertirte ya no en un priest, sino en un high priest para poder ayudar más. Por suerte, cuentas con la ayuda de tus amigos para pasar rápidamente los niveles más bajos e intermedios, a la vez que tu equipamiento ya no deja tanto que desear, aunque todavía se puede mejorar. Empiezas a mejorar  ese equipamiento, pero como en este juego nada es simple, existe una posibilidad de romper tu equipamiento cuanto más lo mejores. Toca conseguir Saint Robe's por un tubo y empezar a romperlas hasta que una pueda llegar a un +7, que a esas alturas está más que bien. No sólo tú, muchos de los miembros de la guild se han equipado mejor y han ido cogiendo experiencia. Entras al castillo y ya no te matan de un golpe, aunque si pasa un grupo bien organizado olvídate de sobrevivir. Por suerte, existe un castillo libre en el que las guilds pequeñas pueden pegarse y aprender como conquistar un castillo, aunque no se suelan lograr defenderlo por demasiado tiempo. Y llega por fin el momento en el que aparece el mensaje en el servidor de que tu guild ha conquistado un castillo. Aunque lo roben en poco tiempo, ya es un hecho histórico que se merece una captura y una celebración tras la competición.

Te das cuenta de que ya has aprendido mucho. Ya has vuelto a tener un nivel alto, y comienzas a explorar las mazmorras avanzadas del juego. Pero no todo es bonito, y empiezan los problemas con algunos de los  compañeros. Tras un tiempo, tus amigos se van contigo y pasáis un tiempo sin pensar en WoE ni en competición, aunque al final os invitan a una guild grande, en la que el juego toma un matiz diferente al estar enfocada a poder ganar. Conoces a otros amigos, sigues mejorando tu forma de jugar y llegas otra vez al nivel máximo. Las mazmorras avanzadas se han convertido en una rutina, y te planteas empezar a intentarlo con los MVPs más fuertes del juego, aprendiendo de tus errores cuando por un fallo fracasa la misión. Pero se vuelve a intentar  y se consigue el ansiado botín.

La guild se rompe por problemas personales del líder. Se forma otra y participas ilusionado. Mientras colaboras en nuevos proyectos, sigues conociendo gente nueva. Ahora tú también puedes ayudar a otros, y ese mapa del volcán sirve para que entre todos asistáis a los compañeros de nivel más bajo para que suban de nivel. Se une más gente, se conquistan castillos y se forman alianzas mientras sigues aprendiendo. Conoces mejor a tus compañeros y sigues perfeccionando tu equipo, que da la impresión de no ser nunca lo suficientemente bueno.


Empiezan los rumores de un reset del servidor. Al final no se hace un reset típico, sino que se abre otro servidor aparte para quien quiera comenzar de nuevo, pero sin obligar a todo el mundo a volver a empezar. Casi todo el servidor se apunta a la nueva aventura, y juntos empezamos una nueva etapa, tan divertida como la primera. Aunque ya no estás perdido como la primera vez que accedes al servidor, todavía puedes disfrutar de esos primeros niveles, y ver a todos los jugadores al nivel 1 en el inicio del servidor es una experiencia única. Se siguen comentando las WoEs, la guild sigue creciendo, continúan los piques y la mejora individual y en grupo. Se conquistan mazmorras, MVPs y castillos. Se siguen formando guilds, se rompen otras y se lucha entre todas en un momento en el que el servidor ha alcanzado un nivel más que aceptable dentro de su competición.

Tras casi dos años, la gente empieza a cansarse, incluidos los líderes de algunas guilds que hacen que sus jugadores también noten ese agotamiento. Algunos amigos empiezan a dejarlo, y aunque otros afirman rotundamente que no se van a ir a otro servidor ni a abandonar, comienzan a notar un bajón, que aderezado con la mala dirección del servidor en algunos aspectos polémicos hace que se vaya más gente. Decides ir junto con algunos de los pocos compañeros que quedan a otro servidor, pero ya no es lo mismo. Aunque sigues aprendiendo y cooperando, te conectas únicamente para conseguir los requisitos semanales para acudir a WoE decentemente y poco más. Ya no hay un componente social tan claro como antes, y también notas tu cansancio tras haberle dedicado muchas horas al RO, llegando al punto en el que te despides de la poca gente que queda conocida y dices adiós a una etapa de tu vida.

Sin embargo, como bien decía un amigo, “el RO no se deja, sólo se toman unas vacaciones”. De vez en cuando, sigo uniéndome a algún servidor con algunos de esos amigos para disfrutar y recordar los viejos tiempos durante una temporada, hasta que te tomas otras vacaciones cada vez más largas, pero cumpliendo el dicho sobre el juego.

10 comentarios:

  1. Nostalgia FTW. Casi lloro leyendo el post xDDD
    Vaya recuerdos y cuántas horas dedicadas al RO... Ains... <3

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    1. Menos mal que no había ninguna forma de saber las horas jugadas, miedo me daría xD.
      Siempre nos quedará la nostalgia ;__;

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  2. En serio, igualmente casi lloro leyendo el post, Hay veces que es insufrible la nostalgia que sientes, te recuerda todas las aventuras que viviste con tus amigos, me encantaría volver a esa etapa de mi vida, que sé que por mucho que me esfuerce no va a volver. El Ragnarok ha sido una de las mejores experiencias que he tenido nunca, y actualmente, me destroza por dentro, cada vez que pienso en él, éstos pensamientos se ramifican de una manera mucho más potente a pensamientos profundos de la vida, como la entrada a otra etapa en la que tienes que dejar atrás la anterior, o el pensar que todas esas aventuras y exploraciones no van a volver, todos esos momentos tan divertidos, que por mucho que tratas de recuperar en un servidor nuevo, no puedes, y lo acabas dejando a los pocos días.
    Me apena pensar que algún día Ragnarok desaparecerá y nuestros sucesores no podrán disfrutar de esas maravillosas experiencias, pero a la vez me alegra el hecho de que no van a sufrir tanto como lo hago yo ahora.
    Perdí a un gran amigo que jugaba mucho conmigo. ¿Sabeis de alguna idea para paliar esta nostalgia tan terrible que me golpea? En serio, a veces es, como os comentaba antes, insufrible. Es cierto que te acabas olvidando, pero como salga alguna canción del Soundtrack, o mismo alguna imagen de anime (Porque las pantallas de carga..etc fueron prácticamente las primeras imágenes "anime" que vi) ya me golpea fuertemente.
    Un Saludazo

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    1. Ojalá hubiese un tratamiento para la nostalgia por RO xD.
      La verdad es que a toda la gente que conozco que haya jugado durante un tiempo al RO no lo olvida nunca, ya que llega un momento en el que tienes muy buenos amigos con los que divertirte, ya no sólo matando enemigos o luchando en las WoEs, sino hablando sentados en cualquier ciudad. Todavía mantengo el contacto con algunos de ellos y además me ayudó a llevarme incluso mejor con los amigos que ya conocía antes de empezar a jugar.
      ¡Suerte con los ataques de nostalgia!

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    2. Me ha encantado tu post, actualmente soy Partner de Youtube (Trabajo subiendo videos a Youtube) Me gustaría mucho que me dieras tu permiso para utilizar gran parte del contenido de este post para hacer un video.

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    3. Si enlazas la entrada y dices de dónde lo has sacado no hay ningún problema en ello. ¡Avísame cuándo lo termines para echarle un vistazo!

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    4. Este comentario ha sido eliminado por el autor.

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    5. Se me eliminó el comentario WTF xDDD
      En fin, ¡Eso haré! Muchísimas gracias :D

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  3. ¡Hola Erain! Al fin tengo el video terminado, Se publicará el próximo Sábado 9 de Mayo, pero ya te voy dejando el link por aquí "https://www.youtube.com/watch?v=FNAhSWVXhfU&feature=youtu.be"
    Espero tu opinión en los comentarios en cuanto se publique! :D

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  4. Hey Erain, Video subido por si te interesa verlo :)

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