lunes, 28 de enero de 2013

La Evolución de Hyrule



Hablar de la saga Zelda sin mencionar el lugar dónde se desarrolla es imposible. Hyrule ha formado desde sus orígenes un elemento más de esta saga, logrando que no podamos imaginarnos la saga sin él. Obviamente no es el único lugar que visitamos en los juegos, teniendo Termina o Koholint Island entre otros gran popularidad.
En este artículo veremos como Hyrule ha ido evolucionando a lo largo de la saga y observaremos las distintas características de cada uno de ellos.

THE LEGEND OF ZELDA:

El primer título de la saga nos mostraba por primera vez Hyrule. Fuera de ser el lugar tranquilo y apacible de entregas posteriores, el Hyrule original era una tierra convulsa atacada por Ganon y sus esbirros. Además era un mundo que explorar enorme para su tiempo, con nueve mazmorras que no tenían porque terminarse en el orden establecido, algo que nos choca a los seguidores que nos enganchamos más tarde, acostumbrados a la linealidad. También llama la atención la falta de cualquier atisbo de civilización, salvo algún que otro NPC.

Aunque no parezca un mundo muy desarrollado, tenemos que tener en cuenta que estableció las bases de la saga, incluyendo un mapa enorme con mazmorras que completar. Aparte introdujo lugares míticos de la saga, como la Montaña de la Muerte o el Bosque Perdido.

THE ADVENTURE OF LINK:


La segunda entrega de la saga nos muestra un Hyrule sin Ganon, derrotado en el anterior juego. Sin embargo, sus esbirros todavía siguen presentes intentando resucitarlo, por lo que Hyrule sigue encontrándose en caos.
En este título Hyrule es de los más raros de la saga, ya que se nos muestra de cara al mar, dividido en Hyrule Occidental e Hyrule Oriental. Aparte de estas dos provincias, tenemos también dos islas que explorar. En esta entrega se introducen las ciudades en Hyrule, teniendo en total ocho asentamientos cuyos nombres se adoptarían en Ocarina of Time para nombrar a los sabios y  a algún que otro personaje.

A LINK TO THE PAST:


La tercera entrega de la saga Zelda nos introdujo una de las dicotomías míticas de la saga, la de luz y oscuridad. A Link To The Past nos muestra un Hyrule más tranquilo que sus predecesores, pero en el que el mago Agahnim está ganando poder en el reino tras convertirse en la mano derecha del rey.
Este Hyrule nos muestra por vez primera muchos de los lugares que se convertirían en clásicos de la saga, como el pueblo de Kakariko o el lago Hylia y recuperó el Bosque Perdido. La Montaña de la Muerte también está presente, teniendo un gran protagonismo.

Sin duda alguna, la mayor innovación de este juego fue incluir otro mundo paralelo a Hyrule, el Mundo Oscuro, que muestra una distorsión del Reino Sagrado creado por Ganon. Cada lugar de Hyrule tiene su presencia distorsionada en este mundo. Así nos encontramos un lago Hylia medio congelado o que el desierto se ha convertido en un pantano. Y ya ni hablemos de cómo nuestro querido Kakariko se ha convertido en un poblado de matones y asesinos.

También tiene el record de mayor número de mazmorras ya que el juego incluye ni más ni menos que doce, de las cuales algunas son una tortura –maldito Palacio de Hielo-.
Sin duda este Hyrule con dos realidades y su gran número de mazmorras es una de las razones por la que muchos fans consideran éste el mejor juego de la saga.

OCARINA OF TIME:


El título por el cual muchos nos introdujimos a esta gran saga. Ocarina of Time nos enseña un Hyrule que ha logrado la paz después de una larga guerra. Incluye muchos de los lugares mencionados anteriormente, contribuyendo a seguir con lugares emblemáticos de la saga.

Una de las innovaciones de este título fue incluir un mapa central, la Pradera de Hyrule desde la cual se accedían a las distintas regiones del juego. Por lo tanto, poseía gran protagonismo ya que estábamos constantemente moviéndonos a través de ella. Además se nos presenta por primera vez la ciudadela de Hyrule, asentada al lado del castillo.

Hyrule acoge el término de multiculturalismo en este título. Por primera vez en la saga nos encontramos con diferentes razas que pueblan Hyrule en relativa armonía entre ellas. Los Kokiri, Goron, Zora o Gerudo hicieron que el reino fuese un lugar diverso, teniendo particularidades y más protagonismo zonas que anteriormente simplemente estaban de paso –tales como el desierto o la Montaña de la Muerte-. Además, estaban enlazados con la historia, siendo imprescindibles para avanzar.

Inspirado por A Link To The Past, Ocarina of Time nos muestra también otra cara oscura de Hyrule. Sin embargo, no nos ofrece una realidad paralela, sino un intervalo de siete años que ha transformado completamente a Hyrule, convirtiéndolo en una tierra sombría y oscura, en la que su capital ha sido destrozada y sus habitantes viven sin esperanza alguna por el futuro de su tierra.
Como pasa en A Link to The Past, estoy seguro que esta realidad oscura de Hyrule es una de las razones por las que Ocarina of Time es considerado por otros el mejor juego de la saga.

THE WIND WAKER:


The Wind Waker es un juego extraño, que recibió muchas críticas inicialmente debido a sus gráficos cel shading y a su supuesto aspecto infantil, así que no podía fallar y nos mostró un mundo muy diferente a lo habitual. Si todavía no habéis jugado a esta joya, os aconsejo pasar al siguiente título de la saga ya que habrá spoilers en este apartado.

Hyrule se nos muestra como un lugar de leyenda, del cual hace mucho que no se sabe nada y que se recuerda a través de antiguas tradiciones. En su lugar, nos movemos por pequeñas islas situadas en un inmenso océano que no tiene fronteras en el juego –aunque Mascarón Rojo no nos deje avanzar más allá de un punto determinado-. En estas islas poco se hablará de Hyrule, aunque muchos de sus emplazamientos y personajes recuerden a este reino antiguo. Tampoco aparecen las razas del Ocarina of Time, sino que se nos introducen unas nuevas y poco a poco iremos distinguiendo algún atisbo de otras, como de algún comerciante Goron a la deriva.

Según avancemos, descubriremos que todas estas islas forman parte de Hyrule, que está situado bajo el océano. Al haber sido atacado por Ganon y no tener salvación ninguna, el rey de Hyrule decidió pedir ayuda a las diosas, que sepultaron el reino atrapando a Ganon. Los supervivientes subieron a las cimas de las montañas y establecieron una nueva civilización.

El Hyrule original que se nos muestra en el juego es escaso, constando  del Castillo de la familia real –en el cual se encuentra la famosa vidriera de los sabios del Ocarina of Time, confirmando una cronología- y el camino que sigue hasta el Castillo de Ganon, mazmorra final del juego. Hyrule es un lugar estático y sin vida que no ocupa una gran parte del juego, aunque los acontecimientos que ocurren en él tienen una gran importancia.

THE MINISH CAP:


Sin duda alguna Hyrule es en este título cuanto menos extraño. No incluye muchas de las localizaciones ya consolidadas en la saga y desaparecen muchas de las razas creadas por títulos antiguos –salvo algún Goron que aparece en una cueva-. Muchas zonas son nuevas, y por lo tanto crea un sentimiento ambiguo. Por un lado, se agradece que las zonas no sean las mismas a las que estamos acostumbrados, pero por otro lado echamos de menos lugares clásicos como Kakariko o el Bosque Perdido. Aun así, incluye algunos típicos, como el lago Hylia o el rancho Lon Lon.

La particularidad de este Hyrule es la presencia de los Minish, que están repartidos por todo el mapa y que nos obligan a convertirnos en uno más de ellos gracias a nuestro sombrero Ezlo. Estos Minish ocupan el lugar dejado por otras razas y se ocupan de poblar diferentes regiones de Hyrule. También las piedras de la suerte crean una especie de Hyrule modificable, en el que cambiamos diversos aspectos, como añadir nuevas casas a la ciudadela o crear puentes para acceder a nuevas zonas, entre muchas otras cosas.

TWILIGHT PRINCESS:



Después de títulos anteriores como The Wind Waker, The Minish Cap o los Four Sword Adventures, este título volvió a recuperar un aspecto más clásico que hacía tiempo que no estaba presente, con un Hyrule lleno de los lugares clásicos de la saga –recupera casi todos los del Ocarina of Time-, con sus correspondientes razas. Todo esto no quita la presencia de nuevas zonas, como el Pico Nevado o Celestia.

Apuesta también por un estilo más adulto, rompiendo con la dinámica animada de las entregas anteriores.
En Twilight Princess, Hyrule está sufriendo serios problemas al estar ocupado por Zant y su legión de súbditos. El reino está sumergido en el Crepúsculo, que convierte al reino en una tierra de tinieblas en la que sus habitantes se convierten en simples ánimas. Poco a poco debemos ir eliminando estas tinieblas de las diferentes zonas del juego.

Lo curioso es que normalmente se nos presenta un Hyrule en paz, lleno de luz que luego se ve distorsionado en otra versión oscura de éste, mientras que en Twilight Princess se nos muestra lo contrario, ya que la segunda mitad del juego se desarrolla en un Hyrule luminoso y con relativa calma.

SKYWARD SWORD:


El título más reciente nos muestra los orígenes de la saga y por lo tanto de Hyrule. Éste todavía no existe como reino, siendo una tierra habitada por algunas razas –no muy carismáticas, por cierto- mientras que los Hylianos habitan en Altárea, una tierra flotante en los cielos donde  se encuentran protegidos de los monstruos que habitan las tierras inferiores.

Las tierras de Hyrule rompen la dinámica de la saga, teniendo tres zonas amplias que abarcan un bosque, un volcán y un desierto. En cada zona habitará una raza, pero no tendremos atisbo alguno de civilización, salvo varias ruinas y mazmorras distribuidas a lo largo del reino.

En este título Hyrule no juega un papel tan fundamental como en otros juegos de la saga, ocupando simplemente el lugar donde se desarrolla la historia y cuyos eventos no repercuten en él. Esta relevancia es justificable si tenemos en cuenta de que en Skyward Sword Hyrule todavía no ha sido constituido y por lo tanto lo único que tenemos es una tierra que no ha visto a ningún Hyliano durante mucho tiempo.
¿Soy al único al qué le hace gracia esta imagen?
Después de todos estos títulos, podemos observar que Hyrule juega un papel fundamental en la saga. Hyrule es tan importante como Link o Zelda, sufriendo una metamorfosis a lo largo de los juegos como también lo han hecho sus personajes principales. Asimismo, sus habitantes están ligados a él, y vemos como cada vez que Hyrule cambia en los juegos, repercute en los habitantes.
Está claro que puede existir un Zelda de gran calidad sin Hyrule, pero creo que el Reino Sagrado es necesario para otorgar cierta cohesión a la saga. Obviamente, una escapada a algún que otro lugar no hace ningún daño y da frescura, pero Hyrule es necesario para mantener en el podio a esta gran leyenda.

1 comentario:

  1. Buen post!
    Hyrule está bien, pero creo que me gusta más Términa, de The legend of Zelda: Majora Mask

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